Ayer después de bajar del avión, coger el bus, coger el tranvía, llegar a casa, bañarme, arreglarme y tomarme una cerveza con Koni para empezar bien mi propio ramadán, decidí irme de copassss... La gente muy maja, muy acogedora, buen rollo vaya: en que bar de Barcelona se puede jugar a la Wii en una pantalla de 2x2 metros con gente que no conoces de nada?
Nada hacia presagiar los sucesos que ocurririan después, cuando ya montado en mi Barsa-bici (
remember), me dirigia presto hacia mi casa a intentar planchar la oreja sin tener que hacer parada en boxes -tu ja m'entens-. A medio camino, cruzando el rio que a dia de hoy aún no he entendido si es natural o un montón de agua embalsada y siempre conduciendo por la ancha acera peatonal, me vi obligado a bajar de mi montura azuzado por los gestos y contorsiones que hacia mi dirigia una persona subida a un extraño coche verde y blanco. Olíendome que no eran seguidores del Betis decidí pararme y fue al leer las grandes letras "POLIZEI" en la puerta del coche cuando empecé a entender de que iva la cosa. A todo esto, quizás deberia explicar que aunque no iva haciendo maniobras "curiosas" iva bastante perjudicado, de lo cual me enorgullezco enormemente. Así que cuando me dijeron que querian hacerme una prueba de alcoholemia, yo muy respetablemente les respondí que no hacia falta y empecé entonces a recitar la lista: de 4 a 6 cervezas, unos chupitos de tequila, 2 Gintonics (bueno y un porrillo que alguien se ruló, pero claro eso no lo dije joder que no estamos locos). Los agentes se hacian cargo de mi estado pero insistieron en hacerme el control, que dió un total de 1,58 que no se exactamente si es mucho o es poco, aunque creo que a ellos les parecia una cantidad muy respetable.
Ahí es donde deberia de acabar la broma sin embargo estos señores, bueno, señor y señora, hartos de darse la brasa mutuamente cada noche decidieron darme un paseo hasta el cuartelillo para amenizar las últimas horas del turno, y de paso levantar al doctor de guardia para sacarme sangre, por que al parecer todavia quedaban resquicios, dudas, aunque las pistas iniciales indicaban que ciertamente iva muy doblado. A todo esto la señora se empezó a poner nerviosa por que no me encontraba en el ordenador y a mi se me estaba empezando a poner una cara de gitano que te cagas. Yo seguia con mi verborrea habitual, preguntándoles de donde eran, que cuanto me iva a costar la broma, les pedia tabaco, lo cual me negaban, yo indignado les decia que en la tele siempre dan tabaco, que si donde está el lavabo que me meo, el doctor me pide que haga esta o aquella postura, que camine en linea recta... Total al final le pregunto al doctor: "y qué como lo ve?" y va el tio y me dice: por mi experiencia y por las pruebas que te acabo de realizar yo creo que el test sanguíneo va a estar en concordancia con el test de alcoholemia. Y yo que ya no me aguantaba la risa le digo: "joder pero si ya lo he dicho cuando me han preguntao la primera vez!" jajaja
